El estado sobre el cual vayamos a aplicar el microcemento influirá en el precio. Así, un soporte en mal estado requiere de un trabajo de preparación mayor que otro que esté en mejores condiciones. Por ejemplo, si queremos aplicar el microcemento en paredes o en suelos con azulejos, es necesario el rejuntado de las juntas, así como el uso de imprimaciones. Estas acciones aumentan el trabajo así como el coste final de la obra.
Cuanta más compleja sea la obra, más caro será el importe final. A una dificultad mayor, la mano de obra se encarece, ya que se emplean más horas de trabajo para realizar la obra. Superficies como unas escaleras, un lavabo de obra o una encimera son un claro ejemplo de una aplicación compleja y laboriosa puesto que pese a que sean superficies más pequeñas, tienen más aristas y esquinas, por lo que el uso de la llana es más delicado y requiere un mayor tiempo y, por tanto, coste.
Por norma general, cuanto mayor sean los metros cuadrados de microcemento que se vayan a aplicar, menor será el precio por m2, y a la inversa. A menos metros, mayor será el precio por metro cuadrado. Esto se explica a los costes fijos y horas de trabajo que no dependen de la superficie que vayamos a revestir.
Los aplicadores de microcemento también influirá en el precio. Es recomendable confiar en manos expertas y con una formación específica la aplicación del microcemento. Respetar los tiempos de aplicación y de secado es parte fundamental para un buen resultado. En Topciment se apuesta por materiales de excelente calidad así como por la formación de sus aplicadores para que conozcan sus propios productos.
Otro factor que influye en el precio del microcemento es la distancia que hay entre el cliente y el aplicador. Por ejemplo, un profesional que se desplace a 10 kilómetros de su cliente tendrá un precio diferente de otro si la distancia es mucho mayor.
La calidad de los materiales influye directamente en el precio. Topciment es la empresa española de microcemento que más de experiencia acumula en su sector. Por ello es fabricante de todos los productos que vende, salvo herramientas y accesorios. De esta manera es capaz de controlar la calidad de los mismos.